Día 1
Un perro ha muerto impunemente a la luz de todos
Día 2
Las evidencias aún están ahí, no han sido levantadas. Un restaurant-bar y una taquería presencian desde ambos lados de la calle los hechos.
Día 3
Ahora todo se ha desvanecido, poco queda rescatable; quien no lo vio no lo creerá
Día 4
Polvo somos y en polvo nos convertiremos, la misma ley se aplica a todos.
2 comentarios:
Yo atropellé a ese perro...
Jejeje
Saludos!!!
Con razón quedo tan madreado!!!
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